Son idénticos.

“Sólo las prostitutas, ladrones y fumones votan por Abdalá”, dijo un amargado y rugiente León en 1996. Su cachorro perdió la segunda vuelta. Idéntica reacción, ahora que los resultados oficiales desmienten la patraña de un falso Exit poll entregado a los medios pautados a las 5 de la tarde del día de las elecciones, por un tal Diego Tello. La mención de que sólo los narcos y los grupos delincuenciales votan por la lista que les representa, es atizar una peligrosa polarización manipulada por los odiadores, porque les falló el relato trucho de que ganaban y de largo en primera vuelta. La voluntad popular se expresó ante una campaña plagada de abusos y arbitrariedades del señorito que simplemente no quiso acatar la Constitución ni las leyes, con autoridades electorales muy complacientes que miran para otro lado ante la reiterada violación de su Ordenamiento Legal. Tendrán que rendir cuentas. A pesar de todo el poder concentrado en manos de la mayor fortuna del país, con todo en contra, con voceros propagandistas disfrazados de periodistas, la Revolución Ciudadana superó su propio techo electoral y disputa valientemente, con los mejores auspicios, la segunda vuelta, a la vez que lleva una numerosa y calificada bancada a la Asamblea Nacional. Igual al Parlamento Andino.

Las provincias aludidas con semejante descalificación, amplificada por la mezquindad de cierto poder mediático, sienten la ofensa proferida y ratifican su adhesión electoral, junto a sectores que, por esta clara muestra de intolerancia, se inclinan por la opción progresista de LUISA. Se pegaron un tiro al pie y les salió el tiro por la culata. Desesperados buscan completar la agenda de sus egoístas ambiciones, como bajar los sueldos y salarios de los ecuatorianos con el pretexto de que dizque son los más altos de la región, Y sin embargo se mueren de hambre, sin trabajo ni salario. Se apresuran en entregar a las transnacionales petroleras nuestra “joya de la corona”, el campo Sacha, muy productivo para la caja fiscal, pretendiendo privarla de ingresos por alrededor de 1 mil 200 millones anuales a favor de los privatizadores que pagarían una cantidad similar, ¡pero para 20 años! Es lo que quieren por la ambición de “hacer buenos negocios”. ¿Vieron lo que le hizo la ministra de Trabajo a la Justicia ecuatoriana?: se burló en sus narices. Ante la visita a su despacho de la Jueza constitucional para constatar el cumplimiento de su sentencia, mandó a colocar en la entrada un letrero que decía “cerrado por desinfección del edificio” y en una pared externa, pintada de blanco, hizo colocar en un vidrio transparente un texto INVISIBLE y cambiado, en letras blancas que sólo se podía leer colocando un fondo oscuro. Una sapada. Señora Jueza, esa burla e incumplimiento de su disposición se llama desacato, castigado con destitución, sin que tenga que preguntarle a nadie. Usted está obligada a velar por la ejecución de su sentencia ¡y punto!

Por otra parte, los esfuerzos desplegados por el centro hacia la izquierda que el año pasado adelantaron un programa de gobierno para recuperar la Patria de todos, se reactivan ahora, para afinar una herramienta de emergencia ante la tragedia nacional que padecemos. Frente a esta realidad, “esa gente” ha salido en estampida a boicotear la unidad de las izquierdas con argumentos regionalistas de estigmatización y hasta de separatismo, simplemente por no haber votado por el niño rico. Que voten por él los de su gallada, ahora que es cuasidelito no mostrar la foto del voto de la Vice; pero no pretendan burlarse del pueblo que tiene conciencia clara que “allí están, esos son los joden la Nación”.